Pila bautismal del siglo XII perteneciente de la iglesia de la Virgen de la Calle, en Redecilla del Camino (Burgos). Foto de Gema Lopez.
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Pila bautismal del siglo XII perteneciente de la iglesia de la Virgen de la Calle, en Redecilla del Camino (Burgos). Foto de Gema Lopez.
Iglesia parroquial de la Asunción, Alaiza, Iruraiz-Gauna (Álava-Araba). Archivo reprográfico particular
Pila bautismal románica en la concatedral de Santa María (Guadalajara), S XIII.(foto de Gema López)
Pila bautismal de la Iglesia parroquial de Calatañazor (Soria), finales SXII.(foto de Gema Lopez)
Pila bautismal prerromanica, Idiazabal, Gipuzkoa (foto de Josu Fernandez Villaverde).
En el interior de la iglesia se custodia una interesantísima pila bautismal prerrománica -la más antigua de cuantas se conservan en Guipúzcoa- perteneciente al santuario de Santa María de Guruzeta, primitiva parroquia de Idiazábal.
Pila bautismal de la iglesia de San Andrés de Ormaiztegui (Guipúzcoa), foto de Josu Fernandez Villaverde.
En el interior de la iglesia hay otra pila bautismal de estilo visigótico, restaurada con buena intención pero que no ha dado los resultados que debería de esperarse. Está decorada con símbolos religiosos muy arcaicos y es la pieza más importante del templo.
http://www.arquivoltas.com/30-Guipuzcoa/01-Ormaiztegui.htm
El baptisterio es un espacio semicircular con esta pila bautismal en el centro, de fines del siglo XV, realizada en piedra de Espejón con forma de copa sobre pie cilíndrico y cuyas dimensiones nos hacen pensar en bautismo por inmersión. Está decorada con doce arcos trilobulados que acogen relieves de los doce Apóstoles.
Posiblemente, pila bautismal por inmersión, que luego se utilizó para guardar el aceite que donaban los fieles.
En la iglesia se conservan dos pilas bautismales, de las cuales una es de arte románico y la otra renacentista, profusamente decorada. La pila tiene de diámetro 1,75 m. y 1,25 m. de altura. Sus relieves muestran escenas de la vida de Jesús y también recoge escenas de “La Biblia Pauperum”.
Foto: archivo reprográfico particular.
La pila es de considerable tamaño (90 cm. de altura x 130 cm. de diámetro), se sitúa sobre una base troncocónica decorada con motivos vegetales y mascarones. Está esculpida en toda su superficie mostrando escenas con figuras de gran relieve, Su borde superior, acaba orlado como de pequeños flecos pétreos que parecen formar dosel a las figuras.
A lo largo de su superficie se desarrolla un programa iconográfico en tres escenas, todas ellas relacionadas con el bautismo y la resurrección, encajando perfectamente con su función.
La escena del bautismo congrega a nueve personajes. Seis adultos y tres niños. El celebrante bendice con la diestra mientras sumerge en la pila al pequeño bautizando al que toma por los pies. Otro personaje a nuestra izquierda colabora y una pareja, hombre y mujer se sitúan a nuestra derecha. Él sujeta la cruz. Ella, casada por la toca. Ambos pueden ser los padres. A la izquierda de la escena, otros dos adultos barbados aguardan con dos niños, uno en pie y otro más pequeño en brazos, quizá para ser bautizados. Más a la izquierda de éstos, un grifo demoníaco, enredado en maraña vegetal, parece haber quedado burlado por la protección que confiere el bautismo.
La expresión de todos los personajes es de gran inexpresividad y cierta rudeza, que hace pensar en mayor arcaísmo que el reconocido para su cronología (Segunda mitad del XII).
En el lado opuesto a la escena de bautismo, se labró el episodio de la visita de las santas mujeres al sepulcro vacío de Cristo. Tres mujeres a la izquierda de la escena, con curioso tocado como de trencilla, plano en su parte superior, se aproximan con tarros de ungüentos al sepulcro custodiado por soldados de muy diversos tamaños y posturas cubiertos de cota de malla. Un ángel levanta la tapa mostrando su vacuidad y otro, turiferario, a nuestra derecha inciensa la escena.
Hay otro grupo de personajes a caballo entre las dos escenas descritas, que son evidentes, sobre los que no todo el mundo está de acuerdo. Son dos personajes que se abrazan y un tercero a nuestra derecha que coloca la mano sobre el hombro del central. Se ha dicho que es la resurrección de Lázaro; sin que haya elementos formales para aseverarlo. También que sean personajes asistentes al bautismo descrito en primer lugar.